Vacaciones necesarias y merecidas

Tres días después del partido de Copa del Rey, al Granada CF le tocó enfrentarse a un Eibar contundente y además, en Ipurúa, campo “maldito” para el conjunto nazarí.

La alineación fue más o menos la habitual: Rui Silva en la portería; Víctor Díaz en el lateral derecho, en el izquierdo Carlos Neva y el centro de la defensa para Domingos y Martínez; el centro del campo, debido a las lesiones de Montoro y Yangel, fue ocupado por Gonalons y Eteki; mientras que en la parte ofensiva se encontraban Vadillo, Carlos Fernández, Puertas y Soldado.

Comenzó el encuentro y así, SD Eibar y Granada CF inauguraban esta decimoctava jornada de Liga Santander, previa a la semana de “vacaciones” de Navidad.

Los jugadores de la escuadra andaluza estuvieron bien el primer cuarto de hora. Carlos Fernández tuvo una ocasión clarísima de gol a pase de Soldado, pero ni Puertas primero, ni él después pudieron empujar el balón y meterlo así en la portería rival. Cómo nos íbamos a acordar de esa acción a lo largo del partido.

Dos minutos después de esa ocasión, Domingos pudo adelantar al equipo rojiblanco (ayer de blanco) en el marcador. Pese a que el balón terminó en las manos del portero, el juez de línea ya había indicado que estaba en posición de fuera de juego.

En el minuto catorce de juego, un jugador local tocó con la mano el balón dentro de su área, todos sabemos lo que pasa cuando eso sucede, pero  el colegiado ni se acercó a revisar la jugada y dejó que siguiera el juego.

A partir de ahí el Granada CF empezó a desvanecerse y llegó el primero del Eibar. Acción parecida a la de Soldado con Carlos Fernández al inicio del encuentro, pero esta vez los protagonistas fueron Escalante que centró y Sergi Enrich que remató y marcó.

Tan solo cinco minutos después, Kike se encargó de sacar petróleo de los fallos de los nazaríes. La jugada nació de una falta que impactó en la barrera, éste se hizo con el balón, no dudó y disparó a portería, marcando así el segundo tanto del encuentro.

Continuaba el partido y no se notaba mejoría alguna en las filas del equipo de Diego Martínez. Coincidió el mejor momento para el equipo local con el peor momento para el equipo visitante, por lo que el Granada CF tenía que estar frenando continuamente las embestidas del conjunto vasco. Numerosas veces tuvo que intervenir Rui Silva, intentando blocar el balón para que la diferencia en el marcador no continuara aumentándose.

Llegó el tiempo de descanso. Había que rearmarse como fuera, todavía quedaban muchos minutos que disputar y podría darse la remontada. Pero en los días en los que tu rival es superior en cuanto a juego y la suerte tampoco te sonríe… poco más se puede hacer.

Al salir del túnel de vestuario prácticamente, Sergi Enrich intentó una chilena tras un mal despeje de Domingos, pero el portugués rectificó a tiempo mandando el balón a córner. No empezaban demasiado bien los segundos cuarenta y cinco minutos.

La única esperanza que se vio fue cuando entró al terreno de juego el venezolano Darwin Machís. Como he dicho anteriormente, cuando la suerte tampoco está de tu lado, puedes tener ocasiones que seguro que no van a entrar. Esto pasó hasta dos veces. Primero, Machís disparó tras una gran jugada individual pero el balón dio en el larguero. Tres minutos después, Álex Martínez lanzó una falta que volvió a impactar en el larguero. Seguidamente, el Eibar armó la contra y de las botas de Inui nació el tercero.

Diego Martínez intentaba animar a sus jugadores gritándoles repetidamente “Venga va, hasta el final”. Pero el conjunto vasco ya había dictado su sentencia y poco más se podía hacer.

Ayer no le salió nada al Granada CF. Para los aficionados es muy extraño ver a nuestro equipo jugar así, estamos acostumbrados al buen juego, a la buena conexión y a la gran fortaleza mental de nuestros jugadores. Pero ayer volvieron a demostrar que son humanos.

Con este partido daba por finalizado el 2019. Ahora llegan unas vacaciones tan necesarias como merecidas para el equipo. Necesarias para recuperar efectivos, descansar y volver más fuertes. Merecidas por el año espléndido llevado a cabo. Pese al final un poco amargo, hay miles de momentos buenos repartidos a lo largo de todo el año. La regularidad del equipo en Segunda, estando en los puestos de ascenso prácticamente toda la temporada, la lucha por el ascenso a la máxima categoría del fútbol español, el ascenso en Son Moix, el inicio espectacular de temporada en Primera Divisón, llegando incluso a situarnos líderes y miles de momentos más que cada aficionado tendrá grabados en su mente y sobretodo en su corazón.

Este año ha sido un año espectacular, un año de descubrimientos y un año de pasión por el fútbol y por el Granada CF. Fortaleciendo la conexión entre los jugadores y la grada hemos conseguido objetivos que creíamos imposibles. El “pasito a pasito” nos ha acompañado en una campaña llena de éxitos y nos acompañará en una temporada llena de retos. Superaremos obstáculos juntos, porque cuando el equipo y la afición nos unimos somos más fuertes.

Ponemos el broche de oro a un 2019 increíble y deseamos que el 2020 sea otro año repleto de salud y éxitos. No hay ninguna duda de que sufriremos pero también disfrutaremos. Con este equipo al fin del mundo.

 

FICHA TÉCNICA:

GRANADA CF: Rui Silva, Carlos Neva (min 56 Adrián Ramos), Martínez, Domingos Duarte, Víctor Díaz, Gonalons, Eteki, Vadillo (min 56 Machís), Puertas (min 76 Álex Martínez), Carlos Fernández y Soldado.

SD EIBAR: Dimitrovic, Tejero, Oliveira, Bigas, Cote, Escalante (min 84 Diop), Expósito, Pedro León, Inui, Sergi Enrich (min 73 Quique) y Kike (min 37 Charles).

GOLES: 1-0 min 21 Sergi Enrich, 2-0 min 26 Kike, 3-0 min 87 Inui.

ÁRBITRO: González Fuertes. Amonestó a los visitantes Gonalons, Domingos Duarte y Eteki, y a los locales Sergi Enrich, Escalante y Pedro León.

INCIDENCIAS: partido correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga Santander, disputado en Ipurúa (Eibar).

Imagen: Twitter Granada CF

Crónica patrocinada por Talleres Las Flores.