Nuevo San Mamés – La Catedral del fútbol español
Viajamos hasta Bilbao para conocer uno de los estadios más bonitos del deporte mundial. El Nuevo San Mamés, que nacía con la difícil papeleta de hacer olvidar a la «Catedral del fútbol español», se presenta como un nuevo icono para la ciudad y una caldera para la práctica del fútbol.
Parecía complicado plantear la sustitución del viejo estadio de San Mamés para levantar en el mismo solar un nuevo coliseo de mayor envergadura. Resultaba casi imposible plasmar la emoción y la pasión del antiguo recinto en esta nueva obra. Pero César Azcárate y su equipo lo consiguieron. En 2013 se inauguraba la nueva casa del equipo vasco.
El solar del Viejo San Mamés
100 años de historia que terminaban entre aplausos y con la presencia de míticos jugadores de la historia del Athletic Club de Bilbao sobre el césped. Así se despidió el estadio de San Mamés antes de comenzar su demolición. Surgió entonces una ola de sentimiento hacia la que había sido la casa del club rojiblanco durante la mayor parte de su historia. El mítico arco que coronaba la tribuna tras la remodelación de 1952 fue movido pieza a pieza hasta Lezama, donde se colocaría de nuevo en señal de homenaje. E incluso el césped del viejo San Mamés fue puesto en venta para que los aficionados más apasionados se llevaran un trozo a casa.
Ya durante los últimos años, la construcción del nuevo estadio había ido avanzando poco a poco en el solar de forma paralela a la disputa de partidos en la vieja Catedral. En la imagen inferior se puede observar la magnitud de uno respecto al otro.

Debido a la necesidad de derribar parte del viejo campo para seguir con la construcción del nuevo, durante una temporada el Athletic de Bilbao jugó con un fondo aún sin levantar. Aún así, el fortín bilbaíno ya ofrecía síntomas de convertirse en el estadio más completo y bonito de España. Tanto es así que a finales de 2015 fue elegido como el mejor edificio deportivo del mundo por el World Architecture Festival celebrado en Singapur.
Un icono para la ciudad
Desde su finalización, el nuevo San Mamés se ha convertido en un nuevo punto de interés para los visitantes de la ciudad. Se alza imponente con unas curvas majestuosas sobre un solar elevado que actúa como pedestal, y que le proporciona una mayor presencia sobre la trama urbana que lo rodea. Así se construían los templos de la Grecia clásica, a los que había que acceder a través de unas escaleras en señal de dominio sobre el paisaje que los rodeaba.
Por la noche, su fachada se ilumina completamente de blanco, excepto los días de partido, en los que la imagen exterior es de color rojo. Además, cuando el Athletic marca, comienzan a parpadear miles de luminarias colocadas por todo su perímetro. Esta imagen al exterior se completa con una enorme pantalla exterior que proyecta vídeos e imágenes relacionadas con el club.

Un mundo de ensueño
Al acceder al interior, el estadio nos deja completamente maravillados. Esa homogeneidad del graderío, la cercanía con el terreno de juego, el brillo de un césped excelente o su enorme cubierta nos hacen incluso dudar de si queremos ver el partido o recorrer todos y cada uno de sus rincones.

Otra de las grandes diferencias de este estadio respecto del resto son sus grandes espacios servidores, libres de apoyos y que crean una serie de anillos diáfanos que actúan como miradores continuos hacia el interior del coliseo.

También resultan destacables las zonas nobles del recinto deportivo, que se han realizado con mimo y delicadeza. Desde el palco de honor hasta los vestuarios, este estadio ha sido tratado con una sutileza excepcional y no como un mero recinto para la práctica del fútbol.

Esperanza en traer puntos a Granada
El Granada CF ha visitado en dos ocasiones el nuevo estadio de San Mamés, el primer año con derrota por 4 goles a 0, y en la última ocasión con victoria por 0-1 con gol de John Córdoba. Además, el actual juego que propone el técnico José González da esperanzas para puntuar en este campo tan complicado.
Lo que sí está claro es que el equipo granadinista no estará solo. Alrededor de 80 aficionados rojiblancos atravesarán la península para dar aliento a los suyos. Ojalá podamos volvernos con los 3 puntos para Granada