Convicción, reacción y remontada
Tras la derrota frente al Manchester United del pasado jueves en el Nuevo Los Cármenes al Granada CF le tocaría afrontar otro reto el fin de semana.
El partido que le esperaba en el José Zorrilla no era para nada fácil, ya que el Valladolid estaba necesitado y deseoso de puntos para poner distancia con los equipos de la zona baja de la clasificación en esa pelea por la permanencia.
Pelea en la que no muchos años atrás estaba inmerso el club rojiblanco prácticamente hasta la última jornada. Las temporadas en Primera del Granada CF tenían eso. Casi era una costumbre que los nazaríes se jugasen la vida en las últimas jornadas, pero este año, al igual que el pasado, es muy diferente.
La temporada pasada los de Diego Martínez consiguieron la permanencia y además meterse de lleno en la lucha por los puestos europeos y en el último partido de la campaña lo que se jugaban no era la permanencia, sino el pase a Europa League. Y lo consiguieron.
Este año, a falta de ocho jornadas para el final, el Granada CF ya ha conseguido la permanencia virtual, como algunos lo llaman. Otros, como el propio Diego Martínez, afirman que la virtualidad en esto del fútbol no existe. Pero todos tienen algo clarísimo, lo que hizo el conjunto andaluz ayer fue dar un paso de gigante para conseguir este objetivo.
Si a principio de Liga, allá por septiembre, nos llegan a decir que la escuadra granadina estaría a mediados del mes de abril casi con la permanencia en el bolsillo y vivo en los cuartos de final de la UEFA Europa League, nos reiríamos o no nos lo creeríamos. Pero justo eso es lo que demuestra y vuelve a demostrar en incontables ocasiones la plantilla. Nunca hay que dejar de creer.
Sabemos que el objetivo principal de la temporada es la permanencia en la máxima categoría del fútbol español. Afianzarse en Primera División es el sueño de la mayoría de equipos de la clasificación y el del equipo granadino no iba a ser menos.
Llegar hasta aquí no ha sido fácil. Los de Diego Martínez han tenido que jugar cada tres días desde el comienzo de temporada. Algo a lo que nadie en este club estaba acostumbrado. Además, la presencia del dichoso “bicho” impactó de lleno en esta plantilla junto con las numerosas lesiones que han tenido que ir afrontando y que siguen afrontando a día de hoy. Por todo esto hay que darle el valor que se merece a la situación que se está viviendo en la ciudad de la Alhambra gracias a este Granada CF.
Para el choque contra el Valladolid el técnico gallego hizo hasta siete rotaciones respecto a la alineación inicial que sacó en el partido de ida de cuartos de final de la Europa League el pasado jueves. En portería se situaría Rui Silva; la defensa estaría compuesta por Quini, Germán, Vallejo y Foulquier; en el centro del campo tratarían de manejar el partido Gonalons y Eteki; mientras que en la parte ofensiva se encontrarían Machís, Fede Vico, Puertas y Jorge Molina.
La escuadra visitante estaba realizando un gran partido pese a las continuas dificultades que le planteaba el conjunto vallisoletano una vez llegaban al área de Masip.
Cuando parecía que el gol por parte de los rojiblancos llegaría en cualquier momento, el que llegó fue el de los blanquivioletas.
En el minuto 41 de partido, al borde del tiempo de descanso, Vallejo hizo penalti sobre Kodro y Orellana adelantó al conjunto local en el marcador.
Duro palo para los de Diego Martínez que, como ya casi es costumbre, deberían intentar remontar un partido si querían puntuar en Valladolid.
La reacción de los andaluces no iba a pasar desapercibida. Tras numerosos intentos por parte de Machís, que estaba en todas las acciones de peligro de su equipo, y los cambios realizados por el míster, los visitantes consiguieron empatar el partido.
Sería en el minuto 77 de juego cuando Foulquier viese en buena posición a Jorge Molina. El de Alcoy remató el centro con su pie izquierdo poniendo el uno a uno en el marcador y demostrando de nuevo que está a un nivel excepcional.
Pero el Granada CF no se conformaba con llevarse un punto de ese partido. Quería más. Para cumplir ese deseo apareció Quini. El lateral cordobés que tanto le había dado al equipo en temporadas pasadas volvía de nuevo a marcar un auténtico golazo que sería el de la victoria.
Muchos se preguntarán cuál es la clave de este equipo. Esa clave, o una de las claves, es la fe en él. Estos jugadores nunca dejan de creer en ellos mismos ni en sus posibilidades. Algo que enseñan partido tras partido a sus aficionados, por si todavía queda alguno que no confíe ciegamente en este Granada CF.
Estos tres puntos son clave para conseguir el objetivo y, además, un chute de adrenalina para afrontar el siguiente partido que será en Old Trafford. En ese escenario tan especial la escuadra rojiblanca tratará de remontar el resultado de la ida.
Visto lo visto, como para no confiar en este equipo.
FICHA TÉCNICA:
Granada CF: Rui Silva, Quini, Germán, Vallejo, Foulquier, Eteki (min 45 Yangel Herrera), Gonalons (min 65 Luis Suárez), Machís, Fede Vico (min 55 Montoro), Puertas y Jorge Molina (min 85 Víctor Díaz).
Real Valladolid: Masip, Olaza, Javi Sánchez (min 45 Miguel Rubio), Bruno, Janko (min 85 Nacho), Roque Mesa, Alcaraz, Orellana, Toni Villa (min 65 Hervías), Kodro (min 85 Weissman) y Guardiola (min 72 Marcos André).
Goles: 0-1 min 41 Orellana; 1-1 min 78 Jorge Molina; 1-2 min 86 Quini.
Árbitro: Del Cerro Grande. Amonestó a los locales Alcaraz, Janko, Masip y Bruno y a los visitantes Vallejo y Luis Suárez.
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima jornada de Liga Santander disputado en el Estadio José Zorrilla (Valladolid).
Imagen: Twitter Granada CF.